Juegos para trabajar la diversidad cultural en niños

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La diversidad cultural proviene de los fenómenos migratorios y la globalización, dando como resultado que en una misma zona geográfica puedan convivir diferentes culturas.

Esta pluralidad permite enseñar a nuestros hijos desde una corta edad valores como la tolerancia y el respeto hacia quienes son diferentes a ellos.

Y considerando que el juego es un lenguaje universal, te presentamos algunos juegos para trabajar la diversidad cultural en los niños.

Juegos para niños de 2 a 6 años

Este grupo cronológico es perfecto para trabajar la diversidad cultural, porque los peques están en la etapa del desarrollo de su personalidad, así que es el momento de enseñarle que todos somos diferentes, pero merecemos el mismo respeto y aceptación. Estos juegos te podrán ayudar al respecto.

Armar puzzles de los niños del mundo

Existen puzzles que muestran imágenes de niños de diferentes partes del mundo, cada uno de ellos con una vestimenta en función a su cultura.

También puedes crear tu propia versión, encuentra imágenes de niños del mundo, las imprimes para luego recortar y armar.

Jugar a los disfraces

Los niños se divierten mucho ante la oportunidad de vestir un disfraz. Pueden mirar juntos fotografías del traje tradicional de otros países y los reproducen con materiales disponibles en el hogar.

Y mientras están en la fiesta de disfraces, pueden hablar acerca del país que representa cada disfraz.

Construir familias

Este es un juego de construcción muy especial y lo puedes elaborar en casa. Necesitas imágenes de personas de todo el mundo. Ahora vas a pedirle a tu peque que forme familias y vas a ver el hermoso resultado.

Juegos para niños de 6 a 12 años

Los niños de esta edad tienen otras preferencias para su diversión, por eso te sugerimos estos juegos en los que ellos podrán demostrar muchas de sus habilidades sociales, las cuales son valiosas para trabajar la diversidad cultural.

Cocinar platos de otros países

Cocinar es una de las actividades que más atrae la atención de los peques, si es el caso de tu hijo, le puedes proponer un poco de variedad culinaria en el hogar.

Pídele que elija un país que haya captado su atención, hazle preguntas como ¿por qué ha seleccionado esa nación?, y escucha sus respuestas.

Pueden hacer una investigación acerca de ese país, como su historia, cultura y por supuesto, la gastronomía.

Encuentra algunas recetas sencillas típicas de ese país, de manera que tu pequeño pueda ayudar en su preparación y comiencen a disfrutar de la exquisita variedad de su propia cocina internacional.

Conocer música y bailes de todo el mundo

Los niños de todas las edades disfrutan de mover el cuerpo al ritmo de la música, así que elegir canciones de diferentes naciones va a ser una decisión muy acertada.

Conocer sonidos de todo el mundo le va a permitir que se familiarice con diferentes instrumentos musicales y los ritmos que proporcionan.

También puede ser muy divertido indagar acerca de los bailes tradicionales de estos países e intentar imitarlos.

Si tienen amigos que provienen de algún país diferente, sería de gran provecho para todos hacer intercambios culturales.

Además, es una excelente oportunidad para hablar acerca de la cultura de las diferentes naciones que conforman el mundo entero, en especial lo referente a la música y los bailes tradicionales.

Conocer y jugar los juegos tradicionales de otros países

Una vez que le has enseñado a tus hijos a jugar los juegos tradicionales de tu país, puedes investigar los de otros países y disfrutar momentos de mucha diversión con estas variaciones.

Avión. En otros países le llaman rayuela, en las naciones latinas se conoce como avión y es un juego clásico. Se dibuja sobre el suelo unas casillas con esta forma característica y cada casilla tiene un número desde el 1 al 10.

La idea es coger una piedra y lanzarla en la casilla 1, luego debe hacer el recorrido de las demás casillas, pero saltando en un solo pie.

Al hacerlo con éxito, lanza la piedra en la casilla siguiente y repite el recorrido. Este proceso se debe repetir de manera sucesiva.

El ojo que brinca. Este es un juego muy conocido en Perú. Los jugadores dibujan sobre el suelo un círculo de unos 30 cm de diámetro y dentro de él colocan unas canicas, puede ser 2 por cada jugador.

Por turnos, cada niño deja caer una canica sobre el círculo, con el objetivo de desplazar una de las canicas hasta fuera de la línea y ser acumulada por el jugador.

El juego culmina cuando todas las canicas están fuera del círculo y quien haya acumulado más, es el ganador.

Estos juegos para trabajar la diversidad cultural son muy fáciles de enseñar a tus peques Si conoces algún recurso o juego que pueda complementar estas actividades, esperamos que este animes a compartirlo en los comentarios.

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